Pobre eres y pobre te quedarás

Desde los tiempos en que el comandante muerto era el rey inobjetable de la pachanga socialista, el discurso de la salvación del hombre, del venezolano y de todo el  mundo, se fundamentaba en dos piedras: la pobreza y la igualdad. Esos eran los elementos fundamentales, la razón de la lucha épica contra el imperio, la motivación para morir en el intento si fuera necesario. La batalla contra la corrupción, el adecentamiento del país o la recuperación de la democracia siempre fueron secundarios. La clave que fundamenta toda la estafa es esa dupla: pobreza e igualdad.

No solamente se trataba realmente, honestamente, de salvar a los pobres de la pobreza. No era el único propósito ni el verdadero. Una cosa es decirlo y otra hacerlo. Una cosa es iniciar las gestiones gubernamentales serias para de verdad superar la pobreza y otra montar la gran olla revolucionaria para estafarlos, como en efecto ha ocurrido en este comunismo pirata y en todos los que han existido. Los pobres siempre terminan más pobres y, además, en el camino meten a pobres a todo el que puedan. Sin falla acaban con la clase media. Lo han hecho en todas partes. Desde la URSS hasta la ruinosa Cuba. No les interesa ni les ha interesado nunca. Lo de los pobres no pasa de ser un eslogan, un grito de borracho. La verdad es que mientras más pobres e ignorantes existan mejor les va a los populistas embusteros. Fue el éxito del comandante muerto y fue el éxito inicial de Maduro. Decimos inicial porque eso le sirvió para medio ganar las elecciones, por una ñinga, pero lo que ha venido después es barranco y estafa pareja. Ya ni los pobres creen en Maduro. Es que finalmente ya pillaron de qué se trata. No son pobres. Son votos andantes. Son votos en los cerros y en los barrios. No más que eso.

Veamos que nos dicen cuatro comunistas sobre los pobres, para qué sirven y cómo hay que tratarlos:

MAO TSE TUNG:

Nuestra China tiene dos cosas: una, la pobreza. La otra, la ignorancia. Los chinos son analfabetos. El nivel de vida es muy bajo y el nivel educativo también. Nuestra revolución se sostiene sobre esos dos pilares. Si China se convierte en un país próspero y alcanza un nivel de vida como los del mundo occidental, la gente no querrá revolución.

JORGE GIORDANI:

El piso político nos lo da la gente pobre. Ellos son los que votan por nosotros. Por eso el discurso de la defensa de los pobres. Así que los pobres tendrán que seguir siendo pobres. Los necesitamos así.

FIDEL CASTRO:

Para mantenernos necesitamos unos 4.000 millones de dólares por año. Más de eso estorba. La gente empieza a vivir bien y se acaba el discurso de la pobreza.

HECTOR RODRIGUEZ.

No se debe sacar a los más necesitados hasta la clase media, ya que podría generar que éstos intentaran convertirse en escuálidos.

Así que el retroceso en la pobreza que se registra este año, además de la mediocridad e incapacidad de los gobernantes, tiene otros orígenes un poco más malignos. Es el pragmatismo en su nivel más descarnado. Los que sí dejan de ser pobres definitivamente son los ladrones del chavismo. Los hay y muy poderosos, pero eso es otro tema.

Por lo pronto, a más pobres más revolución. Eso se ve.